You turned your back on tomorrow, cause you forgot yesterday.

domingo, 28 de agosto de 2011

"I will survive"


Porque no hay nada como las fiestas de las urbanizaciones. Una celebración que nunca entenderé, aceptaré, organizaré, gestionaré y sin embargo probablemente SI intente sabotear con el paso del tiempo. Todo esto se lo debo a un pequeño trauma vivido por estas fechas hace muchos años. Corría un verano como otro cualquiera hasta que en dichas fiestas, interpretamos caóticamente a gloria gaynor…y todo cambió tras ese momento.
Bueno y dejando a un lado mi pequeña terapia, éstos dichosos festejos se producen un único fin de semana al año (gracias a dios). Un par de días donde los vecinos hacen despliegue por toda la urbanización invadiendo la piscina, el paddle  (el cual lleva torturándome desde hace 3 años debajo de mi casa), el parquecito de los críos y hasta los malditos maceteros de las plantas. Mesa arriba, mesa abajo, los niños corriendo, las madres y el bocadillo, venga colchoneta inchable, venga tuppers con tales cantidades de comida capaces de alimentar a la mitad de la cola del INEM y venga mis dolores de cabeza a ritmo de reggaeton.
5 minutos más de tortura y a abrazar la almohada.

sábado, 27 de agosto de 2011

Odio las mudanzas, las odio, y parece que mi familia procede de los antiguos nómadas mongolos (de Mongolia, aunque también) . Dos casas a medias, trayectos de carga y descarga con miles de cajas y estanterías llenas de polvo y recuerdos, recuerdos…se puede saber que es esto? Eso nos lo regaló tu madre cuando nos casamos…Dios pues es horrible.

En un principio, el hecho de trasladarse a otra casa todo es euforia, ilusión, felicidad y esperanza..una casa preciosa, bien decorada con las cucharillas del café a juego con la pasamanería de las cortinas y los frescos del techo. Pero realmente lo único que ocurre es que todo es estrés, prisa, mal humor y ganas de terminar ya con esa maldita tortura
Ya en las últimas, con la casa patas arriba, el camión en la puerta y todos perdiendo peso por deshidratación parece que me vuelven las ganas de mudarme a mi antigua casa y mi antigua rutina. 

miércoles, 24 de agosto de 2011

Feliz cumpleaños

Obsequiado con un fuerte dolor de muelas y un calor asfixiante digno de un agosto alicantino, aquí tirado en el sofá y roncando como un orco encontramos a mi padre. Esta es la pintoresca estampa de su 44º cumpleaños con dos hombres y medio de fondo. Mientras yo, sentada a la otra punta huyendo de sus malolientes zarpas pienso la manera de contentarle de alguna manera ya que esta maldita crisis solo me permite regalarle algo propio, hecho a mano y sacado de mi propia imaginación, lo cual me preocupa bastante teniendo en cuenta que los trabajos de plástica siempre han sido obra de mi madre (la cual ahora friega/destruye los platos del fregadero).

He de reconocer que mi padre es cuanto menos…peculiar, un adulto con la mentalidad de un adolescente. Creo que en lo que tengo uso de razón, nunca ha pisado un hospital ni probado alguna verdura. Se considera abiertamente gay, lo que según afirma, solo dentro del tema de la ropa…entenderán esto solo aquellos que hayan visto su bañador rosa de lunares blancos y sus camisas de flores. Como padre, es gruñón, cabezota y miembro de la “asociación de padres con escopeta recortada”con el lema de “a tus siete primeros novios los mataré y al octavo le preguntaré si viene de familia adinerada”.

Pero por todas estas singularidades, mi padre es único e increíble (si, ahora toca ponerse ñoña). Comprador y regalador compulsivo de caprichos innecesarios, especialista en almuerzos (bueno por su duración y por la cantidad de tapas...califiquémoslo de…comida con sobremesa),
viajes espontáneos, días de playa en Benidorm y mil cosas más que sólo se le ocurrirían a él.
Qué le vamos a hacer, es Juanito.

lunes, 22 de agosto de 2011


Más de tres veces he reescrito el comienzo de una entrada que tal vez nisiquiera publique, parece ser que mi cerebro se niega a recordarme que hace 2 meses las palabras fluían sin problemas obligándome a escribirlas en cualquier parte, ese tiempo en el que sabia escribir a mano y leer más de 5 minutos seguidos sin despistarme..un recuerdo ya bastante lejano. Pero últimamente todo va al contrario de cómo debería.
Alcohol, nicotina, baile, fiesta, amigos, sol, playa y melanoma. En eso consiste un verano digno de recordar por ahora. Gran diferencia con el que yo estoy viviendo, a mi alrededor, cajas, papel de periódico arrugado, cinta de embalar y la casa medio vacía. Vuelvo a mi antigua casa, mi antigua vida, ya que no puedo permitirme la que tengo ahora. Tal vez mala suerte piensen algunos, yo digo que esto sobrepasa ese termino teniendo en cuenta que no ha sido el único pequeño detalle que ha marcado este verano.
Ocupada con mi séptima mudanza, junto a una familia de locos con la cartera vacía, dudas existenciales y unos amigos de pega hacen de éste, un bochorno realmente digno de recordar. Esto sólo conseguirá hacerme más fuerte.